La
ciudad de Santa Rosa celebró su 123 aniversario el día 22 de abril. Su fundador
y los primeros habitantes tal vez imaginaron cómo sería la vida en este tiempo.
El programa de actos no varió de los que cada año se realizan y se inició en la
municipalidad con un acto protocolar y siguió con el Tedeum oficiado en la
Catedral.
Participaron del evento funcionarios municipales encabezados por el
intendente Luis Larrañaga, mientras que en nombre de la provincia lo hizo la
vicegobernadora Norma Durango. Lamentablemente, las diferencias políticas de las
internas o reclamos de la oposición, no fueron un marco digno de la celebración
oficial, que contó con prácticamente nula participación popular.
El
ritmo de la ciudad no se vio alterado en lo más mínimo y seguramente cada
vecino identificado con la fecha y su amor por la ciudad, habrá recordado los
mejores momentos, los logros y en ese balance, habrá apreciado el crecimiento
sostenido de una ciudad que “se va para arriba” con la gran cantidad de
edificios construidos y en construcción.
La
pregunta que ronda con preocupación en los más analíticos es si realmente la
infraestructura de servicios está preparada para semejante proyección. Sin
embargo, el avance edilicio se observa mes a mes, la extensión de la ciudad
hacia los suburbios es una realidad que lamentablemente es titular cuando los
vecinos reclaman por la falta de previsión, al proyectar barrios gigantescos
cuya población supera la de cualquier población mediana de la provincia y sin
embargo, no cuentan con escuela, ni Posta Sanitaria y los reclamos continúan
con los servicios que poco a poco se normalizan, pero cuando los usuarios han
padecido meses de espera.
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